viernes, 16 de noviembre de 2012

Off-topic: Lo llamaremos "el club".


Algunos lo conoceréis como “El Club de Literatura Juvenil de Zaragoza”, otros como “Lij Zgz”, pero yo prefiero llamarlo el club.

Todos reunidos en un círculo, en alguna parte de El pequeño teatro de los libros, un lugar realmente especial, pues fue allí donde parte de mi historia aquí empezó.

Quizá penséis que lo mejor de todo eso, es poder expresarte, de dar tu opinión y que por primera vez sea escuchada y respetada. Pero os equivocáis. Para mí, lo más especial de todo aquello es escuchar. Ver como los libros cobran vida en acaloradas discusiones, con opiniones diferentes, pero en realidad parecidas. O simplemente, personas que pueden expresar lo que sientes por ese libro en palabras y tú, simplemente sonríes porque por una vez alguien te comprende.

Cucharas, barrancos y sillas, son en realidad, palabras terroríficas para algunos de nosotros.

También tenemos carritos inventados, o cajas que pasan de manos en manos, ya que las galletas, aunque ninguno de nosotros lo admitamos, son casi indispensables en las reuniones aunque sea solo para conservar su esencia inicial.

A estas alturas del blog, es bien sabido que soy una persona particularmente peculiar y quizá, una de las cosas que más adoro, es que allí eso no importa. A lo largo de las reuniones, llegas a la conclusión de que todos y cada uno allí tienen una rareza u otra, que cada uno es especial por algo, y puede que quizá sea la primera vez que alguien lo aprecia.

No sería de extrañar que pensases que somos un grupo de personas que se reúnen una vez al mes y después se olvidan los unos de los otros, pero en efecto, te vuelves a equivocar. No miento cuando digo que algunos de nosotros raramente sobreviviríamos sin los demás. Los frecuentes cafés o las vueltas por el centro hasta horas intempestivas solo por el placer de volver a vernos. Y no nos olvidemos de esas veces que vamos al cine, en las que llenamos media sala de cine, y sus paredes se llenan de nuestros cuchicheos comentando la película.

Podría seguir hablando durante horas, y seguir contándoos lo especial que son para mí las tardes de viernes, sean lluviosas o no, nieve o el calor nos derrita a todos, pero creo que mi cometido aquí ha acabado.
Mi propósito aquí era expresaros lo especial que puede resultar a veces conocer a un grupo de personas y compartir palabras sobre un libro que quizá caiga en el olvido, pero para nosotros siempre será el libro que leímos en el club. Los libros seguirán siendo devorados, criticados y amados, pues en 9 días aquello a lo que yo prefiero llamar el club cumple su primer año, y en su próxima reunión celebraremos los años que todavía le quedan.

Y es así, lectores míos, os expreso el amor por un sitio, quizá pequeño, pero extremadamente grande para mí.

Nos leemos pronto.

2 comentarios:

  1. Me encanta que digas que no nos vemos una vez al mes y luego nos olvidamos porque en verdad está pasando eso. :(
    Espero que en cuanto termine los exámenes te vea un poco más porque tío, se me está pudriendo el confeti en casa.

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